«Piezas abstractas en las que el protagonismo absoluto es el color. Ezquerra con grandes brochazos extiende y superpone capas de pintura dejándose llevar por las asociaciones que el proceso le va sugiriendo. Hay un predominio de barridos horizontales. Las veladuras y las transparencias, las grietas visuales que se abren al extender la pintura permiten percibir el hojaldre cromático… El espectador sabe que está ante una pintura plana, pero hay pequeñas ventanas que sugieren profundidad. El sabio uso del color, armonía buscando gamas afines que se interrumpen de repente con una mancha intensa, un rojo, un verde, un amarillo, invitan al contemplador a abismarse en unos territorios indefinidos que puede asociar a espacios celestes o marinos….Javier estuvo unos años recibiendo clases del excepcional pintor Esteban de La Foz.» Luis Alberto Salcines